Si has pensado en visitar Nueva York y reservar un departamento acogedor a través de Airbnb, tenemos noticias frescas: las reglas del juego han cambiado. Desde septiembre de 2023, la Gran Manzana implementó la famosa Ley Local 18, también conocida como la Ley de Registro de Alquileres a Corto Plazo. Y sí, esto ha revolucionado (o más bien limitado) el uso de plataformas como Airbnb. Aquí te contamos todo al respecto.

La nueva ley en pocas palabras
Básicamente, esta legislación exige que los anfitriones que deseen rentar sus propiedades por menos de 30 días deben registrarse ante el gobierno municipal de la ciudad (spoiler: no es tan sencillo como parece). Además, establece lo siguiente:
- El anfitrión debe vivir en la propiedad durante la estancia de los huéspedes.
- Solo se permiten dos huéspedes como máximo a la vez.
¿Qué implica esto?
- Mayor limitación para los turistas:
Los viajeros que buscaban disfrutar de una experiencia más privada al alquilar una casa o departamento completo ahora tendrán menos opciones. Esto puede resultar incómodo para quienes viajan en grupo o valoran la privacidad. - Reducción de ingresos para anfitriones:
Los propietarios que anteriormente generaban ingresos significativos alquilando sus propiedades completas a corto plazo se ven obligados a ofrecer habitaciones individuales, limitando el valor económico de sus propiedades en el mercado turístico. - Cambios en la experiencia de hospedaje:
Los huéspedes que ahora deben compartir la vivienda con el anfitrión pierden parte de la autonomía y comodidad que caracteriza a plataformas como Airbnb. Esto podría hacer que la experiencia sea menos atractiva para muchos. - Aumento de la oferta hotelera:
Al restringir los alquileres a corto plazo de propiedades completas, la ley indirectamente impulsa la demanda por opciones hoteleras, que suelen ser más costosas y menos flexibles.
Esta medida busca priorizar la disponibilidad de viviendas para los residentes locales, pero plantea desafíos tanto para turistas como para anfitriones. Como resultado, Airbnb ha tenido que reducir drásticamente sus ofertas, pasando de más de 22,000 opciones a apenas 2,200. ¡Un recorte del 80%!

Pero, ¿por qué tanta restricción?
Nueva York no tomó esta medida por capricho (aunque muchos no están contentos). Las razones principales son:
- Crisis de vivienda asequible:
Los departamentos que antes se alquilaban a largo plazo están siendo usados como alquileres temporales, dejando a los neoyorquinos luchando por encontrar un lugar para vivir. - Aumento de los precios del alquiler:
Mientras los anfitriones ganan más con turistas, los precios para los residentes se disparan. No todos pueden costear esos departamentos de lujo. - Vecinos molestos:
Imagina vivir en un edificio donde cada semana hay nuevos turistas haciendo fiestas. ¡Un caos total! Esta ley busca preservar la tranquilidad de los vecindarios. - Normas de seguridad y equidad:
Los hoteles deben cumplir con una larga lista de regulaciones y pagar impuestos, algo que muchos anfitriones de Airbnb no hacían. La ciudad quiere nivelar el campo de juego.
El drama de Airbnb
Airbnb no está nada feliz con estas nuevas reglas. Argumentan que:
- Estas restricciones no han resuelto la crisis de vivienda.
- Los hoteles están aprovechando el momento para subir sus precios (alojarse en Nueva York es ahora un 7.4% más caro, comparado con un aumento del 2.1% a nivel nacional).
- Los viajeros tienen menos opciones y costos más altos.
La plataforma incluso ha solicitado que se reconsidere la Ley Local 18, buscando un equilibrio entre los intereses de los residentes y los viajeros.
¿Qué significa esto para ti?
Si planeas visitar Nueva York y pensabas alojarte en un Airbnb, ahora será más difícil encontrar opciones (y probablemente más caras). Pero no te preocupes: siempre puedes buscar alternativas como pequeños hoteles boutique o ser ese amigo cool que se queda con conocidos.
Nueva York sigue siendo increíble, con o sin Airbnb. Pero, ¿tú qué opinas de este tema? ¿Eres Team Airbnb o Team Vecinos Tranquilos? ¡Déjanos tus comentarios!